sábado, 17 de septiembre de 2011

Enamorada como una perra.

-Vilma, te sigo como un perrito y ni puto caso y te mando a tomar por culo y vienes como un corderito. Así funcionáis las tías... ¿verdad?
+Supongo que si. ¿Cómo estás?
-He perdido, mira: como un manquito, con lo que me ha puesto Julia ni siento ni el brazo...
+¿Y te duele?
-No. Lo que me duele es que soy un niñato egoísta con la cara de un gorila.. Eso si que me duele.
+No, ya no pienso eso, a sido un pronto...
-Pues no veas con los prontos, ¿no podrías cortarte un pelo? ¿y no darme tanta caña?
+Si te doy caña será por algo, piti, que no te enteras. Que a mi el primer chico que me gusto fue Frán, en segundo de primaria ¿y sabes lo que le hacía? Le tiraba del pelo, le arañaba la cara y le escondía el estuche.
-Pues yo no tengo estuche, pero eso no es lo importante.
+No
-Entonces esto ¿qué es una declaración enchispada? ¿ o que es esto Vilma?
+Pues si, no se se supone que algo así...
-Haber, haber vamos a ver que no me siento yo las piernas ahora mismo eh.. ¿te refieres a... a cariño así tipo mascota, y besos sin lengua? ¿ O a estar enamorada como una perra?
+Supongo que lo segundo...
-Pero no puedes estar enamorada como una perra de la noche a la mañana ¿no?
+Pues a lo mejor estoy enamorada de ti desde el primer día. Desde que te vi con el chicle pegado en la frente y escondiendo chupitos de ginebra en la biblioteca.
-Si pudiera moverme creo que te besaría.


No hay comentarios:

Publicar un comentario